Capitulo 73
Concluí que mi subconsciente trabaja al doble, a pesar de que mis sueños y pesadillas estaban más elaborados, escuchaba voces externas inventadas por el mismo.
– ¿Qué hay por hacer? – inquirió Joseph con cara de sueño.
– Nada Hijo – La misma Denisse vio la cara de su cansado primogénito – ¿Por qué no descansas?
– Umm, está bien. Iré a dormir – dio la media vuelta y subió las escaleras con una indecisión tremenda.
Era La Última, La Última hoja que escribí. ¿En donde la había dejado?
– Nick, ¿Qué buscas? – curioseó Krystel desde la cama de su ‘amigo’ – ¿Te ayudo?
– Umm No! – habló sin importarle la amabilidad y ofrecimiento de la chica.
– Está bien. – se levantó del lugar y se encaminó a la puerta – Cuando se te pase todo esto, hablamos.
Nicholas seguía buscando en su escritorio con algo de desesperación, Krystel se había marchado, ¿estaba molesta?
Luego de ducharme y alistarme para un día probablemente normal, me reuní con mi familia en el comedor.
– Hola, Mamá. – le di un beso en la mejilla – Hola hermano –lo ignoré.
– Hey, tonta – se quejó Patrick. Solo reí.
– Buen día nena. ¿Vas a salir hoy? – indagó Mi Madre.
– No, no creo – jalé una silla para sentarme y estar más cómoda – ¿Por qué lo preguntas? ¿Saldremos a algún lugar?
– ¿Quieres Salir? – preguntó directamente, mirándome a los ojos – Hija, si quieres… – sentí una extrañeza en sus palabras, la forma de decirlas. Se volteó dándonos la espalda.
– Yo iré con mis amigos a Jugar Futbol – añadió mi hermano.
– Aja – le ignoré. Tomé una de las galletas del frasco de vidrio – Má, ¿Sucede algo?
– Nada importante – me quitó el frasco de las manos – ¿Entonces…?
– Debería preocuparme por el colegio – admití – Ya comenzarán las clases y no sé que me pasa,
– pero me está interesando estudiar.
– ¿Interesando? – dudó – ¿No te interesaba la escuela?
– Pfff..., madre. A esa niña no le interesa nada de eso. – se burló Patrick. Lo empuje para que se callara.
– Si, si me interesa. Pero, ahora siento algo diferente. Quiero enfocarme en algo, lo que voy a estudiar.
– JA! – fue sarcasmo de mi hermano – Nunca podrás.
– Está bien, ______* – mencionó ella. Me levanté para colocarme a su lado – ¿Puedo ir hoy a lo del colegio? Ya sabes, ya empiezan las clases!
– Si – aceptó – Pero te irás con tu hermano.
– ¿Qué? – se quejó, a lo cual yo hice lo mismo – No, ¡Humillación!
– Humillación ir contigo, adefesio. – Le dije. subí por algo, antes de irme –
– ¿No que ya no pelearían nunca? – alcancé oír gritar a mi madre.
Seguía buscando mi hoja, en ese papel había escrito una canción para ____*. Y ahora la necesitaba, me temía que alguien la leyera y supiera que aún sigo enamorado de ella.
Pero, ¿En donde podría estar?
Tuve que resignarme, recordé a Krystel y a los demás. Supuse que estarían abajo. Y fue lo que hice, bajar.
– Marie, por favor – al parecer Kevin padre, suplicaba – No te enojes.
– Paul, ¡Detesto que me digas así y lo sabes! – se indignó Denisse, vio llegar a su hijo y corrió hasta él – Nicholas, ¿Ya descansaste?
– Emm, creo – Se impresionó – ¿Qué harán?
– Ya verán – amenazó Kevin padre al abandonar la habitación.
– ¿Qué le sucede? – curioseó Nicholas.
– Nada, nada – aseguró Denisse. – Alístate, iremos a comer. ¡Hoy no hay nada y tu padre no quiere acompañarme!
– Por eso – susurró – ¿Irán mis hermanos?
– Si, si. Avísales – Ordenó.
Volví a mi habitación para alistar mi ropa y ducharme, luego de eso avisaría a mis hermanos.
Transcurrieron unos 45 minutos cuando ya estaba listo, salí de mi habitación y me dirigí a la de Joe.
Estaba cerrada, por lo general, con mis hermanos no tenía que tocar muchas veces a la puerta para que me atendieran.
Toque dos veces, confirmó que pasara.
Él estaba con el teléfono en la cómoda, en altavoz, recostado muy cómodamente en la cama.
– Joe – lo llamé desde la puerta.
– Un Segundo – pidió a la persona de la otra línea. Me presto atención – Dime…
– Me envió mamá, dice que te alistes, iremos a comer. – estaba por cerrar la puerta, pero me desvié y regresé – Ah, se me olvidaba. ¡No tardes!
– Aja, ya voy – frotó su estomago – Cin, cariño. Después te llamo.
– ¿Ese era Nick? – Preguntó ella, desde la otra línea…
Crucé dos habitaciones más hasta encontrarme con la de mi hermano mayor, Con él no debía llamar a la puerta. Giré la cerradura y al abrirla al instante hice lo opuesto.
Kevin estaba con una Chica! Esperen era…